Comportamiento eléctrico de los coloides
Las micelas están cargadas de electricidad, lo que se puede demostrar introduciendo dos electrodos conectados a una fuente de corriente continua en una dispersión coloidal, en cuyo caso las partículas se mueven según el signo de su carga, sea hacia el ánodo (anaforesis) o hacia el cátodo (cataforesis), originando un fenómeno conocido con el nombre de electroforesis. La velocidad de desplazamiento de las micelas, por unidad de intensidad del campo, es variable y depende de su carga y de la resistencia que le opone el disolvente.
La electroforesis se usa para separar los componentes de una solución coloidal, por ejemplo, las proteínas de la sangre, para ello se arma un dispositivo donde, en la parte inferior del tubo, se ubica la solución coloidal constituida por una mezcla de sustancias coloidales que so cubre con una solución "buffer". Al cerrarse el circuito, las partículas coloidales se van desplazando en las ramas del tubo, dejando entre ellas y el "buffer" y entre los distintos coloides que la constituyen, una superficie de separación perfectamente nítida. Si la mezcla contiene, por ejemplo, dos o más proteínas diferentes y como cada una de ellas tienen su propia velocidad de desplazamiento, se forman distintos frentes de avance, uno por cada prótido. En la figura se ha esquematizado la técnica seguida para separar electroforéticamente dos proteínas; en A se observa el tubo con las dos proteínas mezcladas y el frente 1 que las separa de la solución "buffer". En B ya iniciado el experimento, so han formado dos niveles de avance, el 2, que pertenece a los dos coloides, y el 3 a uno solo de ellos; y en C se ha representado el valor del índice de refracción de la solución a lo largo del eje de la cubeta; ε0 corresponde al de la solución "buffer", ε1 al de la zona en que sólo existe un solo coloide, y ε2 al que contiene los dos. Por último, en D se resume la variación del índice de refracción a lo largo de la cubeta. A cada frente de separación le corresponde un determinado índice de refracción, representado por una punta o diente en la curva.
El origen de la carga eléctrica de la micela puede encontrarse en una de estas posibilidades:
- las micelas, debido a su enorme superficie, adsorben algunos iones existentes en la solución, lo que, al unirse a la partícula coloidal le comunican su carga en cuyo caso los iones de signo opuesto, que quedan en exceso rodean a las micelas formando de este modo una doble capa electrónica.
- algunas micelas, al entrar en solución se disocian separando un ión de carga positiva o negativa, mientras el resto queda cargado de electricidad y convertido en un electrolito coloidal.
Doble capa eléctrica de las mice